Pan brioche dorado y suave, con ese toque salado que marca diferencia. ¿Mermelada de tocino? Sí, leíste bien. Dulce, ahumada y crujiente. Carne de res jugosa, bañada en nuestra salsa secreta de la casa. Queso cheddar derretido al punto perfecto, y claro… más tocino, porque nunca es suficiente.
Ya lo viste, ya se te antojó. No lo pienses tanto… esa papa no se va a comer sola.